Hoy, con un cerebro que parece haber sido amordazado.
Hoy, igual que ayer, ¿igual que mañana?
Hoy buscando culpables en un laberinto enroscado, lleno de malezas y de trampas que me alejan de la otra búsqueda, la principal, en la que me pregunto por qué
Hoy estoy hablando de culpables en vez de estar pensando en
Hoy, que está lluvioso pero podría estar soleado el sol es un signo de pregunta en mi vida que me deja pistas difusas que justamente
Hoy parezco ignorar cuando las necesito tanto porque entro en la duda de si
Hoy vale la pena respirar seguir adelante caminar adelante trabajar adelante sentir que adelante todavía queda mucho por hacer que no dejo para mañana si no que
Hoy es el momento, es el lugar y sin embargo
Hoy estoy tan desubicada, equivocada, paralizada, desencantada, quebrada porque
Ayer caí en el abismo de los culpables sabiendo que
Hoy no me sirve en absoluto cavar una fosa que
Hoy estoy decidida a no ocupar, estoy decidida a no callar lo que
Hoy es una encrucijada que me atrapa y me ciega aunque
Hoy creo tener los ojos bien abiertos, los ojos alerta y atentos, pero atento
Hoy contra la base que supe construir, pero dude y la duda es un lujo que no me puedo permitir
Hoy que me marea el vértigo que me envuelve hasta enfermarme el frenesí, el no frene, no te detengas
Hoy porque tal vez no haya un
Mañana.